Los votos de los famosos

Lita de Lazzari: Yo voto por Duhalde

La reconocida ama de casa y conductora Lita de Lazzari, presidenta de la Liga de Amas de Casa, reconoció sus simpatías por el ex-senador Eduardo Duhalde:

Es muy simple, chicos. Desde que nos gobierna el zurdaje pasa de todo en el país, hasta llueve ceniza, Dios mío. ¿Cuándo llovió ceniza en la CapitaL? Por eso elijo a Duhalde, para que saque a todos los héroes que nos salvaron del terrorismo y los ponga al frente del Ejército de nuevo. Ya van a ver. Y nada de 30.000, no, por lo menos, un millón y medio. Y santo remedio. Y al que no le guste, picana. ¿Cómo vamos a ser gobernados por una montonera, por más viuda que sea? Hay que matarlos a todos. Duhalde es el candidato ideal para eso. No el único, pero el que tiene más... este, ¿puedo decirlo, chicos? No quiero que la gente piense que soy una boca sucia. HUEVOS. Ahí lo dije, ja, ja, ja.

Florencia Peña: Yo voto por Cristina

La actriz y productora Florencia Peña, quien actualmente protagoniza Sr. y Sra. Camas, junto a Gariel Goity, nos dio su argumento para votar la re-elección de Cristina Fernández:

Es que a mí, me parece re-bueno que ella siga al frente. Porque es una mujer con mucho coraje, que quedó viuda e igual sigue como antes. Es como una Madre Coraje, de Brecht, lo que le sobra es coraje y cuando aparece una mujer con ese coraje una piensa: estaría bueno que siga, ¿no?

Jorge Asís: Yo voto a Das Neves

El polémico escritor Jorge Asís, autor de aquel recordado libro Flores robadas en los jardines de Quilmes y candidato a vicepresidente de Jorge Sobisch en 2007, nos explica las características peculiares de su voto:

Mirá, no es tan difícil: no lo puedo votar a Duhalde porque traicionó las ideas de Menem sólo para hacerse el diferente. Pero es el único que puede oponerse a la Elegida que puso a dedo El Elegidor. De última, Duhalde nunca cortó ni pinchó. Si ganan, el que va a gobernar es Das Neves. Duhalde es un verdadero fraude.

Chaqueño Palavecino: Yo la voto a Carrió

El reconocido folclorista dice que, luego de intensas reflexiones, decidió su voto por su coprovinciana Elisa Carrió a quien le ve pasta suficiente para desempeñarse en la Primera Magistratura:

Primero, que ella estuvo con el campo y yo soy del campo. Segundo, que es chaqueña y yo soy chaqueño. Es cierto que la conocen más en Punta del Este que en el Chaco, pero los chaqueños somos así. Es una mujer sólida. A sólida no le gana nadie. Y tiene carácter. Podrido, pero carácter al fin, que es lo que le hace falta al país. Yo le pongo el voto y la invito al Chaco.  

Miki Vainilla: Yo lo voto a Altamira

Ya sé que Altamira tiene menos posibilidades de ganar que Capussotto de volverse un sex-symbol, pero ¿no estaría bueno que ganara? Porque si gana Altamira enseguida expropiaría la tierra, nacionalizaría los bancos, elevaría el salario en un 500 %, le quitaría a la Iglesia todo financiamiento y fusilaría a los milicos asesinos. Todo eso haría. Intentaría hacer, claro. Porque apenas lo anuncie, y con el beneplácito de todos los partidos, los milicos toman el poder, liquidan a cuanto zurdo ande por ahí y el país se arregla. ¿No sería bárbaro? ¡Proceso de Reorganización Nacional Recargado!

Mirtha Legrand: Yo lo voto a De Narváez

¿Cómo que no puede ser Presidente? ¿Porque es colombiano? ¿Y qué? ¿Acaso Aníbal Ibarra no es paraguayo y la Presidenta zurda?  Entonces, ¿a quien tengo que votar para acabar con la inseguridad, con el miedo de la gente a hablar, a salir a la calle, a mandar mensajes de texto? ¿Y al rabino Bergman? Ya sé que es judío pero habla igualito a Massera. ¿Entonces, a quien voto? ¡Daniel, ayudame! 

Marcos Aguinis: Yo voto a Ricardito Alfonsín

El afamado escritor de best-sellers Marcos Aguinis, columnista de La Nación y miembro fundador del Grupo Aurora, explicó su inclinación por el candidato radical:

Cuando salgo a la calle, después de maquillarme, y hablo con la gente, siempre escucho el mismo lamento: el autoritarismo del Gobierno socava nuestra democracia y la convierte en una suerte de Roma de Nerón. Por eso, para volver a tener instituciones sanas, como en Chile o en Brasil, es necesario que suba un radical de pura cepa como el Dr. Alfonsín y me nombre, como hizo su padre, Secretario de Cultura. Ahí se acaban todos los males del país. Eso es lo que explico en mi último libro: La Patria con el bombo, un embarazo no deseado.

En las próximas ediciones seguiremos recabando las posturas de aclamados miembros de nuestra sociedad.